Por Rodrigo Favuto
Feo, malo, chato. Son sinónimos que juntos describen un solo evento, el partido de Deportivo Morón y Estudiantes, encuentro que finalizó 0-0 y que pasó desapercibido durante la mañana del sábado.
Fue un partido que desde la previa se merecía mínimamente un balde de pochoclos, para acompañar las expectativas de algo que no fue en el Estadio Nuevo Francisco Urbano. Cabe destacar que el estado del campo de juego influyó en que el encuentro no tenga rumbo, ya que el mismo en varios sectores se encontraba en muy mal estado.
Ló más destacable del partido fue la actuación del árbitro Carlos Stoklas que, en el transcurso de 15 minutos de la primera parte, ambos equipos ya tenían 3 jugadores con tarjetas amarillas, como consecuencia de lo trabado y luchado que fue el partido sobre todo en la mitad de la cancha.
Durante el primer tiempo hubó una ocasion neta de gol para cada uno. Por el lado del conjunto de Blas Giunta lo tuvo Junior Mendieta, la gran figura de Morón y del partido, quien sacó un gran disparo al arco, pero que supo controlar bien El Mono Martinez, y, por el lado del conjunto Matador, estuvo a punto de concretar a los 42´ a través de Guillermo Benitez, quien desbordó por izquierda luego de un gran pase de Tomás Barbeito y estrelló la pelota contra el palo.
En el complemento no hubó mucha diferencia, la pelota circulo mucho más en los pies del Gallo y Estudiantes siguió sin estar cómodo en el partido. Pese a esto, el empate le quedaba justo al encuentro, ya que la superioridad de Deportivo Morón no se vio reflejada en situaciones claras de gol, sino que se veia en las insinuaciones de Mendieta y las pelotas paradas finales.
Esta vez La Locomotora de Kopriva no encontró su engranaje y completó un mal partido, pero hay que tener en cuenta que este punto puede valer mucho en las fechas finales sabiendo que se jugó mal y, aún así, el Pincha se trajo un punto desde el Oeste.
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