Por Rodolfo Armesto Larcher
En la mañana del pasado miércoles 17 de junio, la Reserva Matadora del Club Atlético Estudiantes (Buenos Aires), no pudo realizar una gran labor y como local perdió por 1 a 0 frente a Acassuso, tras una larga inactividad en su cancha, debido a los arreglos que se realizaron en el campo de juego.
Quizás esa falta de competencia fue la razón por la cual se vieron en el equipo del "Matador de Caseros", mucha desconcentración, errores, demasiado roce, prevaleciendo el juego físico en cada pelota dividida, sumado a imprecisiones a la hora de poder coordinar pases y lograr jugadas claras.
Así se jugó en gran parte del primer tiempo, aunque llegando al final de esta etapa, el local se tranquilizó y comenzó a mejorar el trato con la pelota.
Ese desorden inicial favoreció a los visitantes que tuvieron las mejores oportunidades frente al arco, más por errores de los jugadores locales que por mérito propio.
En la segunda etapa el equipo de Caseros, que utilizó su casaca alternativa verde, tuvo un notable cambio de actitud para jugar y de esa forma hacer el encuentro mucho más entretenido. Si bien no se presentaron muchas chancees claras frente a los arcos, el cotejo se emparejó y las posibilidades se fueron repartiendo para un lado y para el otro.
El Pincha tuvo dos jugadas muy claras que no pudieron ser gol. La primera no fue por el esfuerzo del seguro arquero del “Quemero” Bustamante y del fuerte defensor Villalba que se unieron para salvar en la línea el remate del atacante local Luciano Tomassin, quien había entrado hacía pocos minutos. La segunda chance la protagonizaron los mismos jugadores y el duelo volvió a ganarlo el arquero visitante.
Faltando 5 minutos para el final del partido y cuando todo parecía que terminaría en "tablas", aunque el match merecía tener el tanteador abierto, un centro desde la derecha del ataque de Acassuso, al medio del área fue cabeceado por Juan Pusnar, abajo al palo contrario del arquero matador Alejandro Wottrich, decretando el doloroso 1 a 0 a favor de los visitantes. Resultado que no se modificaría, aunque Estudiantes buscó desesperadamente empatarlo en los minutos que quedaban para finalizar.
En esa desesperación el defensor del pincha, Nicolás Sánchez, que ya estaba amonestado, recibió la segunda tarjeta amarilla, dejando a su equipo con un jugador menos en tiempo de recuperación.
La Reserva Matadora cayó en el Estadio Ciudad de Caseros frente Acassuso y no logró demostrar que a nivel individual como de forma colectiva puede dar mucho más y además de hacerse fuerte de local, ser un equipo más vistoso, seguro y protagonista en cualquier cancha donde se presente.
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