sábado, 16 de mayo de 2015

EL QUE PINCHA ÚLTIMO...


Esta vez los papeles estaban cambiados. Brown de Adrogué era el puntero y el Pincha llegaba de punto al sur, donde a pesar de haber ganado en su última presentación, en los papeles era presa accesible para un conjunto que aspira a campeón y de los que mejor juegan en el campeonato. Aquella vez, más precisamente en la primavera del 2014, Estudiantes llegaba puntero e invicto de la zona A, pero tropezó con un Brown aguerrido que no peleaba por nada que lo bajó a tierra y le dio el punta pie inicial para lo que fue la increíble perdida de un ascenso casi imposible de perder.

Estudiantes , con alma y vida, fue a plantarsele a un rival que nadie quiere enfrentar. Si bien venía de caer derrotado ante Almirante Brown, en su casa se hace fuerte y tenía que defender la punta ante un Pincha con DT nuevo que pocas veces se fue del Lorenzo Arandilla con una sonrisa.

Con el tiempo amenazante, pero que le daba respiro a un campo resembrado que ya había sufrido las lluvias de la noche del viernes, el encuentro comenzó sin un claro dominador. Brown de Adrogué insinuaba más de lo que concretaba, sobre todo por su banda derecha, donde entre Joel Barbosa, Maximiliano Brito y Matías Sproat aprovecharon cada vez que pudieron mediante triangulaciones la espalda de Guillermo Benítez. El Pincha esperaba una contra que le permitiera llegar al arco defendido por Martín Ríos, pero la falta de conexión entre sus lineas y la dificultad para desbordar con sus dos carrileros, dejaban a los delanteros muy apartados dedicados a la lucha con los centrales del Tricolor.



En una de esas contras, Diego Torres ganó una pelota en el medio y habilitó a Franco Montero quien cayó en el área ante un cruce de una pierna rival, claro penal para Estudiantes que no vio el árbitro Pablo Giménez, quien amonestó al "Tanque" en un grave error del colegiado. Brown tuvo momentos del buen juego que mostró durante este 2015, con Joel Barbosa tomándo la lanza desde el fondo, avisó a los 38´ tras un centro del ex Boca que terminó en el área, donde Maximiliano Brito la mató de pecho y de media vuelta le pegó al arco ante la mirada de Ramiro Martínez, quien afortunadamente la vio pasar al lado del palo izquierdo.



En el complemento el Pincha casi madruga al Tricolor. A los cuatro minutos, Nahuel Benítez recibió por derecha, giró de espalda ante la marca de su rival y sacudió el arco de Brown que encontró las manos de Martín Ríos para mandarla al córner. A los 54´ Maximiliano Brito desbordó por derecha ante la inestabilidad de la defensa y envió el centro para Juan Manuel García, este la paró e increíblemente se lo perdió solo en el área Pincha. Pablo Vicó adelantó a Joel Barbosa en un intento de ganar metros en todas las líneas, pero Estudiantes empezó a aprovechar ese hueco y comenzó a complicar al Tricolor.

Sin embargo el juego asociado por el piso, a pesar de lo blando y poseado que estaba el terreno de juego, le trajo frutos al local. Brito encaró por izquierda y habilitó a García, quien entró solo por el medio y le erró al arco perdiendose un gol hecho ante algún grito que se escapó de las tribunas festejando algo que no fue. Las mejores situaciones se dieron en esos minutos, ya que a los 63´, luego de una pelota parada desde la derecha, Hernán Lópes ganó en el área rival y cuando la pelota se metía, Victor Soto apareció sobre la línea para darle vida al hasta entonces puntero. Minuto después, Nahuel Benítez escapó por la banda izquierda y estrelló su remate en el poste derecho de Martín Ríos.



El envión anímico más que futbolístico tuvo sus frutos: Franco Montero habilitó a Nahuel Benítez, quien eludió en el área e infantilmente Victor Soto lo bajó en un claro penal que Pablo Giménez no dudó en sancionar. Sin embargo, el línea Gustavo Apazza desde su posición vio simulación del ex San Lorenzo, lo que generó una gran polémica que, finalmente, terminó en la firme decisión de sancionar el penal. Diego Torres fue el encargado a los 69´ de ejecutar el disparo desde los 12 pasos que suavemente el Oveja cambió por gol.

La tranquilidad del resultado se perdió rápidamente, ya que al minuto Nicolás Álvarez vio la roja por una fuerte patada. A partir de allí Kopriva plantó una línea de cinco con los ingresos de Fabián Silva y Alejandro Kruchowski para aguantar la embestida del local. No obstante, Brown no supo aprovechar el hombre de más y sus intentos de igualar el marcador murieron en reiterados centros frontales. Gustavo Benítez se convirtió en el patrón de la defensa que se cansó de sacar todo lo que caía en el área y con el escudo en la mano, aguantaron un resultado impensado en la tarde de Adrogué.


Ganó Estudiantes, sí, segunda victoria consecutiva y primera fuera de Caseros del equipo ahora dirigido por Juan Carlos Kopriva que empieza a pensar en algo más que escaparle al fondo de la tabla. Queda claro que la vida da revanchas, esta vez el Matador le hizo honor a su apodo y pinchó al lider en su casa, esa misma que fue testigo del arranque de la debacle de un equipo y, año más tarde, del comienzo de una racha resurgidora.

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