BAJO LA LUPANI

Estudiantes tuvo su debut formal en la tarde-noche de ayer en el sur ante Talleres de Remedios de Escalada. El destino quiso que la temporada arrancara con el mismo rival que con el que había debutado Guillermo Duró en el banco del Matador, pero esta vez el DT tuvo el tiempo suficiente para el armado del grupo y planificación del partido.

No arrancaron bien las cosas para el Pincha, con varias dudas en el fondo y con falta de tenencia de la pelota, Talleres se adueñó de ella y comenzó a generar peligro con la rapidez de sus extremos. Sin embargo, el local carecía de profundidad y no lograba inquietar el arco defendido por Joaquín Pucheta, pero una supuesta mano en el área que solo Ignacio Lupani vio terminó decretando la sentencia desde los doce pasos. Sebastián Prieto fue el encargado de ejecutarlo en dos ocasiones (el primero lo anularon por invación) para darle la ventaja al local.

No pasaba mucho en el partido, Talleres no tenía profundidad y a Estudiantes le costaba mucho tener la pelota, muriendo siempre en pelotazos o dependiendo mucho de la pelota parada. Y así fue que llegó el empate con polémica, luego del corner ejecutado por Santiago Prim que encontró el cabezazo de Contreras, pero su destino cruzaría sobre la línea la mano de Gaston Buttaccio que Lupani no vio y la pelota se metería suavemente dentro del arco para decretar el empate.

En el complemento Estudiantes aprovechó la siesta santiagueña de Talleres y madrugaría a los dos minutos, cuando una nueva pelota parada encontró dos cabezazos dentro del área de Estudiantes, donde el último de Matías Contreras habilitó a Buttaccio, quien ingresaría solo por la banda derecha para poner el 2 a 1. A partir de allí el entusiasmo en la visita creció y sacó pecho de la situación, aunque no dejaba de quedar en evidencia la falta de fútbol en varios jugadores. Talleres con poco iba, sin mucha claridad, pero una falta de Buttaccio dentro del área le devolvió la esperanza al Tallarín y el inoxidable Daniel Vega pondría el empate.

Allí se murió el encuentro y quedaron expuestas las falencias de ambos equipos. Estudiantes aún no encontró su idea de fútbol y sigue teniendo dificultades en el armado de juego. Faltó conexión entre sus líneas y se notó mucho en el aislamiento que sufrieron Passerini y Rodríguez en la delantera. Sin embargo mostró un buen laburo en la pelota parada, donde Estudiantes tuvo las mejores ocasiones y pudo haberse llevado el triunfo. Parrafo aparte para Ignacio Lupani, quien cobró un penal inexistente en el primer gol de Talleres y no vio una clarísima mano en el empate de Estudiantes.

Fue empate en Escalada, un resultado positivo en el comienzo del torneo ante un rival complicado en una cancha donde Estudiantes había sido humillado el campeonato pasado. Ahora deberá revalidar el punto en casa, cuando enfrente a Deportivo Morón posiblemente el próximo sábado 15:30 horas en Caseros.